Asociación de Padres de Familia de la Secundaria Técnica N° 127
ENLACE DE NUESTRA COMUNIDAD
|
|||
![]() |
|||
|
|||
Si buscas
hosting web,
dominios web,
correos empresariales o
crear páginas web gratis,
ingresa a
PaginaMX
![]() ![]()
LA PIRÁMIDE DEL ÉXITOPor: John R. WoodenJohn Wooden ha sido el único hombre elevado al Salón de la Fama del basketball como jugador y entrenador. Se retiró después de 40 años como entrenador, dejando un récord sin comparación en el deporte norteamericano. Durante sus 27 años entrenando en la Universidad de California en Los Angeles, U.C.L.A., sus equipos nunca tuvieron una temporada de pérdidas. En sus últimos 12 años con la universidad, ganaron 10 campeonatos nacionales, siete de ellos en forma consecutiva, y todavía mantiene el récord mundial de juegos ganados consecutivamente: 88 juegos en cuatro temporadas. Conocí la obra de John Wooden cuando leí por primera vez el libro Dr. Deming, de Rafael Aguayo en 1995, donde Aguayo comentaba una reseña aparecida en un ejemplar del Wall Street Journal publicado en 1986 acerca de John Wooden y su trabajo y quedé gratamente impresionado por la profundidad de su pensamiento y el énfasis que hacía sobre el individuo integral, sobre la importancia de los Principios y Valores para lograr el éxito, y por su estilo fluido y natural. Decidí conocer un poco más sobre la obra de Wooden. En Internet existe una página (www.woodenclassic.com/bio/index-bio.html/) dedicada a la obra de Wooden donde podemos seguir su carrera de 47 años como entrenador de basketball, y hasta oírlo comentando sobre algunos aspectos de su filosofía de vida y de su experiencia como entrenador. Las enseñanzas impartidas a sus jugadores a lo largo de los años han creado muchas personas con una sólida formación hacia el logro. Quienes hoy hacemos uso de ese conocimiento para apoyar los procesos de transformación de nuestras empresas nos sentimos obligados a transmitir lo que hemos aprendido más allá de nuestras áreas inmediatas de influencia, y es por ello que he deseado dedicar estas líneas a promocionar sus ideas sobre los aspectos esenciales que debe poner en práctica un equipo de personas que desee enfocarse hacia el éxito. El éxito es un camino, no un destino. Algunas de las ideas que Wooden desarrolla pueden leerse con parecido significado, pero con distintas palabras en las enseñanzas de Stephen R. Covey. La Pirámide del Exito define aquellos elementos que nos permiten recorrer bien ese camino. Ella fue el fundamento de su éxito como entrenador, y del éxito en la vida de muchos muchachos que aprovecharon sus enseñanzas. Su definición de Éxito es quizás una de las más profundas que he tenido la oportunidad de escuchar. LA DEFINICIÓN DE ÉXITO La definición de éxito varía y cada quien puede tener una idea diferente de lo que el éxito significa. Durante mis años en bachillerato, recuerdo como uno de mis profesores trató de comunicarnos que el éxito no necesariamente significa la acumulación de posesiones materiales, o una posición de prestigio, o de poder. Eso me hizo pensar en el verdadero significado de éxito, y durante mis años de universidad pensé mucho en ello, pero nunca tuve tiempo para dedicarme a hacerlo con la debida profundidad. Quizás sea un poco egoísta, pero muchos padres juzgaban a los profesores por las calificaciones que sus hijos sacaban en el colegio. Si las notas eran buenas, los profesores eran buenos. Si las notas eran malas, era culpa del profesor. Fue entonces que comencé a desarrollar este concepto, de forma de poder enseñar a mis muchachos una forma de poder juzgar su éxito por sí mismos. Después de varios años y cientos de horas de esfuerzo, desarrollé lo que se ha dado en llamar la Pirámide del Éxito de Wooden. Mi definición de éxito está en la cúspide de la pirámide: El éxito es la paz mental que nace como resultado natural de la íntima satisfacción lograda al saber que uno hizo lo mejor que pudo para convertirse en lo mejor que uno es capaz de ser. Solo una persona puede juzgar su propio éxito …Ud. Ud. podrá engañar a todo el mundo, pero a fin de cuentas solo Ud. sabe si metió la pata o no. Ud. sabe si se metió por un atajo inadecuado, o si hizo trampas, o se copió el examen. Aunque nadie más lo sepa, Ud. sí lo sabe. Hoy en día vuelvo mi mirada atrás y veo con tristeza lo que algunos llaman éxito. A lo largo de los años hemos repartido miles de copias de la Pirámide. Al inicio de la temporada acostumbraba a reunirme con los jugadores y discutir la Pirámide en detalle con ellos. Creo firmemente que es una base sobre la que cualquier persona en cualquier actividad puede desarrollar un proceso exitoso. LA ESTRUCTURA Ningún edificio puede ser mejor que las fundaciones que soportan su estructura, y ningún hombre puede ser mejor de lo que permita su formación mental. Por ello, las mismas piedras angulares todavía se mantienen: Laboriosidad y Entusiasmo. Nada sustituye al trabajo y para trabajar duro por algo Ud. debe disfrutar de lo que hace. Si Ud. no se entusiasma, nunca podrá trabajar al máximo de sus habilidades. Los tres atributos que puse en la base de la pirámide entre las dos piedras angulares son: Amistad, Cooperación y Lealtad. Todas ellas son similares e ilustran que se requiere un esfuerzo mancomunado para enlazar nuestras dos piedras angulares. Los dos bloques que contienen el segundo nivel son el Auto-Control y la Perseverancia o Intención. Si Ud. pierde su control interior, todo se derrumbará. Ud. no puede funcionar ni física ni mentalmente ni en ninguna otra forma a menos que Ud. ponga sus emociones bajo control. Por eso es que prefiero que mis equipos mantengan un nivel constante de logro con mejoramiento gradual, en lugar de picos de éxitos y valles de fracasos. Pienso que cada pico tiene su Valle correspondiente, al igual que existe una decepción para cada alegría. Lo importante es que reconozcamos las cosas buenas y no nos perdamos al sentirnos víctimas de nuestra mala fortuna. Para que un atleta funcione apropiadamente debe poseer Perseverancia. Necesitamos un propósito definido y un objetivo si deseamos progresar. Si su intención no está en lo que está haciendo, Ud. no será capaz de resistir la tentación de hacer cualquier otra cosa que a lo mejor le brinde un placer temporal. Estar Alerta e Iniciativa se sitúan en la parte interior del segundo nivel. Ud. debe mantenerse constantemente vivo y alerta buscando oportunidades para mejorar. Esto es especialmente así en basketball, pero se da también en las organizaciones. Ud. debe mantenerse alerta para aprovechar las debilidades o errores de su contrario. Unido a esto debe existir la iniciativa del individuo para actuar solo. Tenga el coraje para tomar decisiones. En el corazón de la pirámide está la Condición. Siempre enfaticé este aspecto en mis jugadores. No me refiero a la condición física únicamente. Ud. no puede lograr y mantener buenas condiciones físicas a menos que Ud. esté moral y mentalmente condicionado. Es imposible estar moralmente condicionado a menos que Ud. este espiritualmente condicionado. Siempre le enseñé a mis jugadores que la condición de nuestro equipo dependía de dos factores: de la forma en que se entrenaran durante las prácticas, y de cuan bien se comportaban entre prácticas. Uno no puede ni lograr ni mantener una condición adecuada si no trabaja simultáneamente en ambos aspectos. En la parte central, en el corazón de la estructura está la Destreza. Destreza, si lo analizamos desde el punto de vista del basketball, es el conocimiento y la habilidad para ejecutar los aspectos fundamentales del juego rápida y apropiadamente. Estar en capacidad de ejecutarlos no es suficiente; debe poderse hacer rápidamente. Y ser capaz de hacerlo rápidamente tampoco es suficiente; deben poder hacerlo rápidamente y en forma precisa en el momento adecuado. Uno debe aprender a reaccionar apropiadamente, casi en forma instintiva. El Espíritu de Equipo es un bloque importante en el centro de la estructura; y no es sino el deseo de sacrificar la gloria personal por el bienestar del grupo, como un todo. Es unión y consideración unos por otros. Si los jugadores no tienen consideración unos por otros, es imposible implementar jugadas que requieran el concurso de todo el equipo. No es estrictamente necesario que todo el mundo se lleve bien, pero deben respetarse unos a otros y subordinar sus egoísmos por el bienestar del equipo. El equipo es primero. Para un jugador, lo más importante es el resto del equipo. Carácter y Confianza emergerán de la Condición, La Destreza y el Espíritu de Equipo. Para tener equilibrio y ser verdaderamente confiable, Ud. tiene que estar en condiciones. Saber que uno está bien en lo fundamental, y poseer la actitud adecuada hacia el equipo. Ud. debe estar preparado y saber que está preparado. Cerca de la cúspide está la Grandeza Competitiva. Este estado no se puede lograr sin carácter y confianza. Cada bloque se apoya en otro. Uno no podrá alcanzarse sin el otro, pero al estar todos en su lugar, Ud. estará en el camino hacia el éxito. Si uno se desmorona, toda la pirámide se puede derrumbar. LOS PRINCIPIOS QUE LOS ENLAZAN Esta pirámide es trabada con un grupo de cualidades esenciales para la definición final de Éxito. La podemos unir con la Ambición, que si se enfoca adecuadamente puede ser un activo extraordinario, pero si se desenfoca puede transformarse más bien en un detrimento. Ud. debe ser Adaptable para trabajar con otros y para enfrentar el reto de situaciones diferentes. Y debemos mostrar Ingenio porque en casi todas las situaciones es necesario usar el buen juicio. Luchar le da la habilidad de hacerlo sin tener miedo a una fuerte confrontación. Fe camina lado a lado de luchar porque es esencial que Ud. crea en su objetivo; pero no olvidemos que no podemos lograr la fe sin desarrollar la capacidad de rezar, de pedir ayuda honesta a quien nos la puede brindar. Necesitamos tener mucha Paciencia porque el camino es difícil, se hará escabroso a veces, y no debemos esperar resultados demasiado pronto. Terminan la madeja que aglutina los bloques de la Pirámide cuatro principios permanentes: Confiabilidad, Integridad, Honestidad y Sinceridad. Estos principios y habilidades tejen una madeja hasta crear una sólida estructura. Cuando todos ellos trabajan juntos pueden construir el proceso hacia el éxito basado en su propio conjunto de objetivos, no los de otras personas. UN LEGADO PARA UNA JUVENTUD INQUIETA Algunos escépticos han cuestionado la posibilidad que esta pirámide sea de utilidad. No me corresponde a mi responder esta inquietud, cada persona debe responderla por sí misma. Si sé que a través de los años he recibido numerosas invitaciones para hablar sobre mi pirámide. De lo que sí estoy seguro es que ella puede ser una buena fuente de ayuda, y de seguro nunca los va a dejar mal. Algunos amigos han sugerido que registre la Pirámide y la venda, siempre he rehusado a hacer esto. Si de alguna forma la pirámide puede ayudar a alguien yo me sentiré sumamente halagado. No la creé para ser vendida sino para ser usada como una fuente de enseñanza, y ha sido aprovechada tanto en las escuelas, como en las empresas, como en los campos de entrenamiento deportivo. Gran cantidad de jugadores se me han acercado para obtener nuevas copias, especialmente después de su graduación. “Coach” me comentan, “Ha sido de gran utilidad para mi”. Los muchachos que asisten a mis clínicas de basketball durante el verano siempre están ansiosos de recibir copias de la pirámide. Me he tomado el cuidado de firmar cada copia y esto parece ser muy importante para ellos. Mis ex jugadores de U.C.L.A. me han comentado lo provechosa que la pirámide les ha sido en sus profesiones, y que es justamente ahora que pueden apreciarla en toda su magnitud. Me siento humildemente halagado por el comentario hecho por Bart Starr, el famoso quaterback de los Green Bay Packers, en su libro: Una Perspectiva sobre la Victoria (Follet Publishing 1972): “Continuar ganando es la marca del campeón. Del verdadero ganador. Creo que John Wooden es el mejor ejemplo de ello. Lo que ha hecho año tras año durante la década pasada es fabuloso. El sigue ganando porque hay algo que ha logrado imprimir en esos jóvenes que los ayudará durante toda su vida. Su filosofía es parecida a la que tenía el Coach Vince Lombardi. El Coach Wooden equipara el basketball al juego de la vida. El dice que uno debe ser generoso, que debemos jugar por el bien del equipo, que tenemos que ser disciplinados y hacer lo que tenemos que hacer por el bien colectivo. Quiere que juguemos como una unidad. En realidad esto es lo que uno termina haciendo en la vida, porque más temprano que tarde terminamos en un equipo.” Mi gran Legado no es haber dependido de decirle a nadie lo que tiene que hacer. Al igual que todos esos muchachos que ya me dejaron para seguir nuevos rumbos, les dimos las fundaciones, queda bajo su responsabilidad mejorar la estructura. COMO NACIÓ Un día mi profesor de matemáticas de bachillerato, Sr. Shidler, nos pidió que hiciéramos una composición definiendo la palabra éxito. El quería que profundizáramos en el contenido, independientemente si para nosotros significaba hacernos ricos o ganar un juego se baseball. Allí nació mi primera semilla de inquietud sobre el tema. Más adelante, noté como los padres exigían a sus hijos que sacaran A o B en las clases de inglés, aunque no fueran capaces de hacerlo. Para esos padres, A o B se consideraba un éxito, y todo lo demás un fracaso. Es bueno reconocer que la mayoría de nosotros está en el promedio, y la nota promedio es C. Para esos padres, el que sus hijos sacaran una nota promedio era un verdadero fracaso, aunque esos muchachos lo hubieran intentado hasta el máximo de sus posibilidades. Yo sentía que eso era enormemente injusto. Aparentemente una C era buena para el hijo del vecino, pero no para el suyo. A mi no me gustó esa forma de medir el éxito o el fracaso. Yo pensaba que si un muchacho trataba con gran esfuerzo de lograr una nota y sacaba una C, eso era mucho mas meritorio que uno que sacara B sin esfuerzo alguno; así que comencé a buscar una forma que hiciera de mi un mejor profesor al mismo tiempo de dar a mis estudiantes un sistema de evaluación que fuera mucho más productivo, provechoso, y justo. Desde que fuimos muchachos, mi papá nos decía: “No se preocupen demasiado en ser mejor que otros”. Si uno no logra comprender esta frase en todo su significado a muchos le parecerá extraña, por eso papá siembre agregaba: “Traten siempre ser lo mejor que Uds. pueden ser. Aprendan de los demás, sí, pero no traten de ser mejores que los demás. Uds. no pueden controlar eso. En su lugar, traten con gran dedicación y esfuerzo de ser lo mejor que Uds. son capaces de ser. Sobre eso sí que tienen control. A lo mejor llegan a ser mejor que otros, o a lo mejor no, pero eso no es lo verdaderamente importante.” Esas eran palabra de gran fuerza. Las recordé al tratar de dar a mis estudiantes algo a lo que pudieran aspirar que no fueran solo altas calificaciones. Manteniendo todas esas cosas en la mente, por allá por 1934 acuñé mi propia definición de éxito: El éxito es la paz mental que nace como resultado natural de la íntima satisfacción lograda al saber que uno hizo lo mejor que pudo para convertirse en lo mejor que uno es capaz de ser. Pero al final, la única persona que puede juzgar su nivel de éxito es Ud. Si ha alcanzado el verdadero éxito, todo lo que se derive de ese éxito es simplemente una consecuencia …sea el escore, un trofeo, un campeonato nacional, fama o fortuna. Todo eso es resultado del éxito y no el éxito en sí, indicadores que quizás Ud. logro el éxito en la competencia más importante. La competencia más importante es esforzanos para lograr nuestro mejor nivel personal, ese que sí está bajo nuestro control. Cuando Ud. logra eso, ha alcanzado el verdadero éxito, ¡punto! Ud. ha ganado solo cuando Ud. sabe con absoluta certeza que Ud. es un ganador. Todos somos distintos, unos chiquitos, otros grandes, unos gordos y otros flacos, unos rápidos y otros lentos; pero todos tenemos la misma oportunidad de hacer el mejor uso de lo que somos, no importa la situación que enfrentemos. Ya habiendo definido lo que era el éxito, tenía ante mi una tarea quizás más importante, comprender y poder describir lo qué era necesario para alcanzar el éxito, tanto individualmente, como en un equipo de basketball, o como integrante de cualquier otro equipo en la vida. Sin esto era como hacer un viaje en carro sabiendo a dónde queremos ir pero sin saber como llegar, lo que algunos pueden definir como ir a ninguna parte. LA PRIMERA PIEDRA: LABORIOSIDAD En 1934 comencé poniendo dos puntales muy importantes y poderosos, y hoy los volvería a colocar porque sin ellos no es posible el éxito. Ellos son los bloques más importantes y esenciales en la Pirámide: Laboriosidad y Entusiasmo. Laboriosidad, puesto en palabras sencillas, quiere decir que uno tiene que trabajar y trabajar duro. No hay substituto para el trabajo. Todas las cosas que valen la pena requieren trabajo y esfuerzo. Reto a quien sea a que me muestre a alguien que haya logrado grandeza sin trabajar fuertemente para lograrla. ¿Michael Jordan? Mucho más importante que sus habilidades físicas es la forma como ha trabajado incansablemente para vencer sus debilidades. ¿Carl Ripken, Jr.? Igual, y así cualquiera que deseen mencionar que haya logrado éxito personal y grandeza competitiva. Ejecutivos de negocio, médicos, sacerdotes, deportistas, todos ellos comparten una característica común: no solo trabajan con ahínco, sino que disfrutan de hacerlo. Aunque el trabajo duro es esencial, solo nosotros sabemos si le estamos poniendo todo lo que debemos. Aquellos que siempre están tratando de buscarle la vuelta nunca lograrán ni siquiera acercarse a tomar conciencia cabal de todo su potencial. Así que escogí el trabajo como el primer bloque de la Pirámide del Éxito. Lo llamo Laboriosidad porque quiero dar el mensaje que es algo más que hacer acto de presencia y simular el trabajo. Mucha gente que le cuenta que ha trabajado muy duro durante todo el día en realidad no lo ha hecho, con certeza no al máximo de su potencial. El trabajo laborioso es la forma mas consciente, asidua e inspiradora de trabajar. Es, aparte del deseo, el apetito por trabajar; trabajar duramente es un ingrediente fundamental del éxito. Sin él, no hay donde construir. Ud. puede trabajar sin ser laborioso, pero Ud. no puede ser laborioso sin trabajar. EL SEGUNDO BLOQUE: ENTUSIASMO En el otro extremo de la fundación de la Pirámide está mi segundo puntal: el entusiasmo. Entusiasmo significa que a uno le debe gustar lo que hace; nuestro corazón debe estar en ello. Sin entusiasmo no es posible trabajar al máximo de nuestras habilidades. Esto es cierto en cualquier profesión. Para esa gente que se vive quejando, reclamando lo duro que es su trabajo, el fastidio de trabajar con muchachos, con subalternos; que vive dándose cabezazos contra la pared, es preciso parar de quejarse, reclamar o criticar; simplemente váyase. A lo mejor no puede irse hoy mismo, pero esté claro que eventualmente tendrá que irse, porque si no le gusta lo que hace, es casi imposible crear entusiasmo por ello. El entusiasmo es esencial para desempeñarse con laboriosidad. El entusiasmo es la brasa que enciende el trabajo normal y lo transforma en trabajo laborioso. El entusiasmo se les pega a quienes trabajan con Ud., a todo el que se le acerca. Tener entusiasmo es esencial, especialmente si Ud. es un líder, o si espera transformarse en uno. El Liderazgo exige entusiasmo. La gente en posiciones de liderazgo tiene muchas responsabilidades. Ellos deben influenciar de manera positiva a aquellos bajo su supervisión. Deben estar interesados en buscar la mejor forma en lugar de hacer las cosas a su modo. Los líderes deben asegurarse que aquellos bajo su supervisión comprenden que ellos están trabajando con el líder, no para el líder. Pero lo más importante es que el líder debe generar entusiasmo si espera extraer lo mejor de sí mismos y de las personas bajo su tutela. Indiferentemente de si Ud. está liderizando como profesor, como entrenador, como padre, como gerente o como miembro de un equipo, Ud. debe cultivar el entusiasmo. Sin él Ud. no podrá ser laborioso hasta el nivel máximo de sus habilidades. Con él, Ud. estimula a otros para alcanzar ese nivel superior de desempeño. Así que a ambos extremos de la Pirámide están los dos puntales: Laboriosidad y Entusiasmo. Ud. debe tener la voluntad de trabajar duro y en forma entusiasta. Separados, ambos son fuertes por naturaleza. Juntos, se transforman en una fuerza de poder ilimitado. Ud. necesita esas fuerza dentro de sí; y si Ud. es un líder, pronto inspirará esas cualidades en otros a través de su ejemplo. EL TERCER BLOQUE: LA AMISTAD Ninguna estructura es fuerte y sólida a menos que tenga unas fundaciones firmes. Los bloques entre los puntales crean unas fundaciones muy consistentes. Esos bloques son: Amistad, Lealtad y Cooperación. Para el éxito individual o en equipo, debe prevalecer un nivel de amistad; una fuerza muy poderosa que fluye de la estima mutua, el respeto y la devoción. No podemos llamar amistad el gesto de alguien que le hace una atención; él o ella solamente están tratando de ser atentos. La amistad es mutua, hacerse el bien unos a otros. No existe una verdadera amistad cuando solo una parte de la ecuación está funcionando. Ambos deben estar allí para que la amistad pueda existir. La amistad toma tiempo y comprensión. Cuando estamos trabajando fuertemente para lograr un objetivo común, será muy raro que alguien se resista a su amistad si Ud. la está ofreciendo abierta, espontánea y sinceramente. Sin embargo, a lo mejor Ud. va a tener que dar el primer paso, ser lo suficientemente valiente como para ofrecer su amistad. Hacia el final de la Guerra Civil norteamericana, se estaban llevando a cabo unas reparaciones en la Casa Blanca. Uno de los consejeros que favorecía castigar a los del Sur le dijo a Abraham Lincoln: “Sr. Presidente, se supone que Ud. debe destruir a sus enemigos, no hacerlos sus amigos”, a lo que Abraham Lincoln contesto: “Es que acaso no estoy destruyendo al enemigo cuando los hago mis amigos”. Lincoln comprendía la tremenda fuerza que tiene la amistad. La amistad incluye a otros y le da fuerza a sus fundaciones. EL CUARTO BLOQUE: LA LEALTAD Cómo podemos trabajar al máximo de nuestras habilidades a menos que tengamos a alguien o a algo a lo que somos leales? Solo entonces es que alcanzamos esa paz y esa destreza adicional para realizarnos al máximo de nuestro potencial. La lealtad hacia y con los que trabajamos es absolutamente necesaria para lograr el éxito. Significa mantener el respeto por nosotros mismos, saber cómo y con quienes estamos aliados, y respetar a quienes trabajan con nosotros. El respeto fortalece la lealtad. Yo luchaba por un alto nivel de lealtad en todos mis equipos, desde Indiana hasta UCLA. La lealtad es una fuerza cohesiva que forja a los individuos a desempeñarse como un equipo. La lealtad es muy importante cuando las cosas se ponen difíciles, como sucede con frecuencia cuando aumenta el reto que nos enfrenta. Lealtad es esa poderosa fuerza que nos propulsa a nuestros mayores logros individuales y como puntales del desempeño superior de un equipo. EL QUINTO BLOQUE: COOPERACION La única forma de alcanzar el máximo potencial de un grupo es tener cooperación a todos los niveles. Esto significa trabajar juntos en forma organizada para alcanzar nuestra meta común. Para lograr cooperación debemos primero dar cooperación. Ud. no es la única persona con buenas ideas. Si desea que lo oigan, escuche. Trate constantemente de encontrar la mejor forma en lugar de insistir en que las cosas se hagan a su forma. Todo esto requiere cooperación. Ella faculta a los individuos a moverse juntos hacia adelante, a moverse en la misma dirección en lugar de deambular en diferentes direcciones. 10 poderosos caballos pecherones no podrían mover el cochecito de un bebé si todos trabajan independientemente unos de otros, no importa cuan fuertes cada uno de ellos pueda ser a título individual. El cochecito no se moverá ni un ápice sin la mutua cooperación. EL SEXTO BLOQUE: AUTO-CONTROL Así como ningún edificio puede ser mejor que sus fundaciones, ningún individuo es mejor que sus fundamentos mentales. Los primeros cinco bloques son una base consistente sobre la cual construir el éxito. Sobre este apoyo ubicaremos los cuatro bloques siguientes: Auto-Control, Mantenerse Alerta, Iniciativa, e Intención. El Auto-control es esencial para la disciplina y el dominio de las emociones, para nuestra propia disciplina y para la disciplina de aquellos bajo nuestra supervisión. Ud. no puede funcionar física y mentalmente a menos que sus emociones se mantengan bajo control. Por eso es que yo no acostumbraba a dar discursos emocionantes antes de los juegos para crear un pico de emociones momentáneas. Más bien prefería mantener un proceso gradual de incremento en los logros y las emociones. Para cada pico que uno crea, existe el subsiguiente valle. No me gustan los valles. El Auto-control brinda estabilidad emocional y pocos valles. Recuerden que disciplinar a otros no es castigarlos. Uno disciplina para ayudar, para mejorar, para corregir, para prevenir, no para castigar, para humillar o para vengarse. Cuando uno castiga uno antagoniza, y no es posible obtener resultados positivos con gente que se le opone. El Auto-control es esencial para evitar antagonizar a otros. Cuando Ud. pierde el control de sus emociones, cuando su auto-disciplina se resquebraja, su juicio y su sentido común sufren. ¿Cómo va Ud. a desempeñarse al máximo cuando su juicio está comprometido? Muchos años antes de que ganáramos un campeonato vencí el desaliento no viviendo en el pasado. Para hacer lo mejor en el futuro uno tiene que trabajar en el “ahora”. Quedarse en el pasado lo limita para hacer lo que debe hacer en el presente. La quejadera, la chilladera, la lloradera y la excusadera lo excluye del presente; y es allí donde el auto-control entra. El autocontrol lo mantiene en el presente y le abre las puertas del futuro, luche por mantener su auto-control. EL SEPTIMO BLOQUE: MANTÉNGASE ALERTA Mantenerse Alerta es el siguiente bloque en la Pirámide. Siempre hay algo que está sucediendo a nuestro alrededor que nos brindará conocimiento si estamos alertas para darnos cuenta. Con demasiada frecuencia nos perdemos en nuestra propia visión de túnel y perdemos la oportunidad de ver las cosas que están allí para ser aprovechadas, para ser aprendidas. Mi héroe americano favorito es Abraham Lincoln. Lincoln era un hombre alerta quien acostumbraba a decir que nunca había conocido a nadie de quien no hubiera podido aprender algo, aunque la mayoría de las veces era algo que no debía aprender. Eso también es aprendizaje y hay que estar alerta para aprovecharlo. Si nos esforzamos para ser lo mejor que podemos, estar alertas hará las cosas mucho más fáciles. Sea un permanente observador, rápido para detectar el punto débil para corregirlo o aprovecharlo, según sea el caso. EL OCTAVO BLOQUE: INICIATIVA Jamás tema fracasar. La Iniciativa es tener el coraje de tomar decisiones y tomar acción. Tengan en mente que una que otra vez vamos a fracasar, y esto debe estar claro para ustedes. Ninguno de nosotros es perfecto. Pero si uno tiene miedo al fracaso, jamás hará las cosas que está en capacidad de hacer. Siempre les hacía esta advertencia a mis equipos, “Respete a su oponente, pero no le tema. Uds. no tienen nada que perder si se han preparado al máximo de sus habilidades.” Nunca teman al fracaso, el fracaso es algo de lo que debemos aprender. Cuando ustedes tienen iniciativa, entonces pueden vanagloriarse que han vencido el miedo. EL NOVENO BLOQUE: PERSEVERANCIA El noveno bloque del segundo nivel de la Pirámide del Éxito es la Perseverancia. Podría decir que también se llama Determinación, o Persistencia, Tenacidad, o Intención. Lo que significa es la habilidad para resistir a la tentación y mantenerse en el rumbo, de concentrarse en sus objetivos con determinación y decisión. INICIATIVA Impaciencia es querer mucho, demasiado pronto. Intención no significa querer algo, significa hacer algo. La ruta al verdadero logro toma tiempo, mucho tiempo, pero uno no se da por vencido. Tendrá obstáculos y fracasos. Quizás hasta tenga que comenzar de nuevo. A o mejor tiene que cambiar sus métodos; irse alrededor de los obstáculos, por encima de ellos, o por debajo. Es posible que tenga que retroceder y comenzar con otro pie, pero no se va a dar por vencido; Ud. se mantiene en el curso. Para poder hacer esto, debe tener “Intención”. Quisiera darles un pequeño ejemplo de lo que quiero decir. En 1948 fue que comencé a enseñar basketball en UCLA. Cada hora de práctica significaba trabajo duro y exigente. Cada día de práctica trabajamos muy duro. Cada temporada era también duro trabajo. Por 14 años trabajamos duro y no ganamos ni un campeonato nacional. Sin embargo, ganamos el campeonato nacional el décimo quinto año, y otro el décimo sexto …y ocho más en los siguientes 10 años. Sea persistente. Sea determinado, sea tenaz. Esté absolutamente determinado a lograr su meta, eso es Intención. Si Ud. Tiene la intención y sus habilidades se lo permiten, eventualmente Ud. alcanzará el tope de la montaña. EL DÉCIMO BLOQUE: CONDICIÓN En el tercer nivel puse lo que considero el corazón de la Pirámide. A simple vista pareciera que se refiere solamente al aspecto deportivo, pero no es así. Las características personales del tercer nivel se aplican en forma general tanto a los individuos como a todo tipo de equipo. Estos bloques son: Condiciones, Destreza y Espíritu de Equipo. Ud. debe estar en condiciones para lo que sea que Ud. tiene que hacer si desea desempeñarse al máximo de su habilidad. Hay diferentes condiciones para diferentes profesiones, un buzo de profundidades requiere condiciones distintas de las de un vendedor. Un cirujano requiere condiciones físicas distintas de las de un obrero de la construcción. El Presidente Ejecutivo de una empresa tiene requerimientos distintos a los de un mesonero. A la condición física debemos agregar las condiciones mentales, y morales. El énfasis que yo hacía a mis equipos sobre el condicionamiento era integral, no solamente físico. Algunos creían que mis jugadores solo estaban en mejores condiciones físicas que nuestros contrarios, lo cual era posible, pero ellos también tenían unas condiciones mentales y emocionales superiores. Lo que Ud. debe hacer es identificar las condiciones que su trabajo requiere que se tengan, y lograrlas. Sin un condicionamiento apropiado en todas las áreas, se quedará corto en su potencial. Es imposible alcanzar y mantener condiciones físicas apropiadas sin alcanzar primero la condición mental y moral que se necesita. EL DÉCIMO PRIMER BLOQUE: DESTREZA En el núcleo central de la Pirámide está la Destreza. Ud. debe saber lo que hace y debe estar en capacidad de hacerlo rápida y apropiadamente. En UCLA tuve jugadores que podían ser grandes encestadores, pero que no lograban tirar a la cesta así que no podían ayudar al equipo. También tuve muchos que lanzaban tiros de todas partes, pero que no tenían la puntería necesaria. Ud. Necesita ambos; la habilidad de hacer las cosas rápidamente, pero también de hacerlas apropiadamente. Destreza es ser capaz de desempeñar todo su trabajo, no solamente parte de él. Esto es cierto así Ud. sea un atleta o un abogado, un cirujano o un representante de ventas, o lo que sea. Ud. debe estar en condiciones de hacer las cosas rápida y apropiadamente. Eso es destreza. Soy una persona que valoro enormemente la experiencia, pero siempre preferí gran destreza y poca experiencia que mucha experiencia y poca destreza. EL DÉCIMO SEGUNDO BLOQUE: ESPÍRITU DE EQUIPO El último bloque en el tercer nivel es el Espíritu de Equipo. Lo que esto significa es pensar en los demás. Significa diluirse en el grupo para el beneficio del grupo. Significa que uno no solamente va a estar dispuesto sino deseoso por sacrificar su propio interés personal por la gloria y el bienestar de todos. Hay una diferencia profunda entre disposición y deseo. Un prisionero en grilletes podrá estar dispuesto a romper rocas para evitar el castigo …pero ¿cuán deseoso está de hacerlo? Por supuesto que todos queremos hacerlo bien y recibir reconocimiento individual. Eso está bien si Ud. pone sus habilidades a disposición de su equipo, cualquiera que sea su equipo: en los deportes, en los negocios, en la familia o en la comunidad. EL DÉCIMO SEGUNDO BLOQUE: CARACTER Cerca del pináculo de la Pirámide están el Carácter y la Confianza. Tengo la convicción que estos dos bloques fundamentales de la estructura son el resultado natural de la calidad personal que le hemos puesto a los otros niveles. El Carácter y la Confianza son el resultado esperado de todo el grupo de bloques que hemos ido construyendo. Por eso es que es tan importante el orden de los niveles, y de los bloques que lo constituyen. Estoy absolutamente convencido que carácter y confianza no pueden surgir hasta que el resto de los bloques estén en su sitio. Mi definición de carácter es muy sencilla: Sea Ud. mismo. Ud. no tiene que actuar. Ud. no tiene que simular ser lo que Ud. no es. Ser quien uno es estar cómodos con nosotros, con lo que somos, y ese equilibrio nos permite funcionar cerca de nuestro nivel de competencia. Uno comprende que el objetivo no es satisfacer lo que todo el mundo espera de Ud. sino lo que Ud. espera de Ud. Concéntrese 100% a ser lo mejor que Ud. es capaz de ser. Lograr esto exige carácter. EL DÉCIMO TERCER BLOQUE: CONFIANZA La Confianza es un aspecto esencial. Ud. debe creer en Ud. si espera que los demás crean en Ud. Sin embargo, el carácter y la confianza que Ud. transmite es el resultado de haberse preparado adecuadamente. (Recuerde que no prepararse es prepararse para fracasar). Cada bloque se apoya en los otros. Cuando todos están en su lugar, carácter, el sentido de equilibrio y la confianza son el resultado esperado. No es posible forzar que esto pase, ello sucede naturalmente cuando existe una preparación adecuada. EL DÉCIMO CUARTO BLOQUE: GRANDEZA COMPETITIVA Que entendemos por Grandeza Competitiva? Es estar en capacidad de rendir al máximo cuando el máximo es lo que se necesita. Es disfrutar del reto cuando las cosas se ponen difíciles, inclusive cuando se ponen muy difíciles. ¡Es la Chispa! Los verdaderos ases de la competencia saben que existe una euforia de estar involucrado en algo que significa un reto importante. Ellos no le temen, la buscan. No existe placer en hacer algo que cualquiera puede hacer, algo corriente, ordinario, fácil. Sin embargo, la mayoría de las cosas que hacemos en nuestra vida son sumamente sencillas. Cualquiera puede hacerlas. Ellas no le van a brindar la excitación que nace de estar involucrado en algo que reta su cuerpo, su mente y su espíritu. Las personas con espíritu de alta competencia aman el reto, ellos saben que el reto les brinda la oportunidad para hacer lo mejor que pueden. Esta excitación y la forma como se canaliza hace la Grandeza Competitiva. EL CEMENTO: PACIENCIA Y FÉ La Paciencia y la Fe están presentes a todo lo largo de la pirámide y son como el cemento que permite mantenerla unida. PACIENCIA: La mayoría de nosotros somos impacientes. A medida que maduramos, pensamos que sabemos más y que las cosas deberían suceder más rápidamente. Paciencia es la virtud de prepararse para cualquier realización de significado. Toma tiempo crear la excelencia, si pudiera hacerse rápidamente, muchos más pudieran hacerlo. La comida que Ud. pide en un sitio de comida rápida puede ser barata, puede ser rápida, hasta pueda que sepa bien, pero nunca será lo que pudiéramos llamar: “Una experiencia gastronómica digna de recordar“. Las cosas buenas toman tiempo y eso requiere paciencia. Grandeza Competitiva requiere paciencia. Excelencia requiere paciencia, pero sobre todo, el Éxito requiere paciencia. FE: También creo que uno debe tener fe en que las cosas van a suceder como debe ser. Tomen conciencia que no estoy diciendo que necesariamente las cosas van a pasar como queremos. Sin embargo, debemos creer que las cosas van a suceder como deben si hemos hecho lo que debemos. Con eso sí podemos estar conformes. LA CIMA: En la parte más alta de la Pirámide está la cima. En la nuestra la cima es el Éxito. Por sobre los bloques de Grandeza Competitiva y más allá de la Paciencia y la Fe, representando la culminación de todas las cualidades presentes abajo, está el Éxito. El verdadero éxito se logra sólo a través de la satisfacción de saber que hicimos todo lo que pudimos, dentro de las limitaciones de nuestras habilidades, para transformarnos en lo mejor que somos capaces. El éxito no es perfección. Es imposible lograr la perfección, pero intentar alcanzar la perfección es la meta. El éxito es hacer el 100% de esfuerzo a través de nuestra mente, de nuestro cuerpo, de nuestra alma. Como entrenador, o profesor, o como líder, Ud. debe llevar a sus seguidores al más alto nivel de competencia y entonces enfrentar el verdadero reto de agruparlos en un equipo. Esto no es nada fácil; la Pirámide les enseña una forma de hacerlo. Lo que es más importante de darnos cuenta es que el éxito esta bajo nuestro propio control, no de nuestros jueces, o de nuestros oponentes, o de nuestros críticos, o de cualquiera. Es su decisión y es una decisión que Ud. debe tomar, la oportunidad de determinar su propio éxito. | |||
Tu Sitio Web Gratis © 2025 Asociación de Padres de Familia de la Secundaria Técnica N° 12770494 |